domingo, 31 de octubre de 2010

Perdida.

En mitad de la noche me despierto. Todo ha sido un sueño. Noto un cuerpo a mi lado y me doy la vuelta lentamente. Ahí está él, durmiendo, tan relajado. No puedo creer que haya pasado realmente. Apenas lo conozco, un par de semanas quizá. Lo pienso, y me parece conocerlo desde hace años. ¿ Cómo si no explicar la complicidad que hay entre nosotros? Por no hablar de la química, pero ese es otro tema. Un mechón de pelo le cubre timidamente la frente, intento apartárselo. Es ondulado y oscuro. Como sus ojos. Justo en ese momento se despierta. Me mira divertido. Yo me sumerjo de lleno en sus ojos oscuros, intentando, en la penumbra de la habitación delimitar donde termina su pupila y dónde empieza el iris. Se apoya sobre un codo, incorporándose y sonríe. Dejo de respirar. ¿Cómo lo hace? Es esa maldita sonrisa suya que me deja sin respiración. Ahora es él quien me aparta un rizo algo rebelde. Desliza su mano hasta mi barbilla y allí se detiene. Sigue sonriendo, y yo sigo sin respirar. Se acerca, y despacio, besa. No lo conozco apenas, y sin embargo, es el mejor beso de mi vida. Se separa y me guiña un ojo.

Estoy perdida.

Totalmente perdida.

Ruido blanco.

Todo lo que debes hacer es ponerte los auriculares, echarte en el suelo y escuchar el CD de tu vida. Pista tras pista, ninguna se puede saltar, todas han pasado y de una forma u otra, servirán para ir hacia adelante. No te arrepientas, no te juzgues. Se quien eres, y no hay nada mejor para el mundo. Pausa, rewind, play, aún, aún y aún más. Nunca detengas tu CD, sigue registrando sonidos para lograr explicar el caos que hay en tu interior. Y si te sale una lágrima cuando las escuchas, no tengas miedo, es como la lágrima de un fan cuando escucha su canción preferida. El resto, es ruido blanco.

lunes, 25 de octubre de 2010

¿Te atreves?

Reír es arriesgarse a parecer tonto. Llorar es arriesgarse a parecer sentimental. Mostrar tus sentimientos es arriesgar tu yo interior. Exponer tus ideas o tus sueños a una multitud es arriesgarse a perderlos. Amar es arriesgarse a no ser amado de la misma manera. Vivir es arriesgarse a morir. Desear es arriesgarse a ser defraudado. Intentar es arriesgarse a fallar.


Acercarse a alguien es arriesgarse a involucrarse.

sábado, 23 de octubre de 2010

Esta noche, no

Y nos escondemos en las madrugadas de invierno, contrarestando el frio de la calle con el calor de nuestros cuerpos. Difuminando las gotas de lluvia con la humedad de nuestra piel. Cambiando las bufandas y los abrigos, por meternos entre las sábanas...
-¿Te irás?

-Esta noche no.

domingo, 17 de octubre de 2010

Un día cualquiera

El aire se partió en dos y él tendió su mano hacia ella, como si no se hubiera levantado nunca de la tumba del pasado, del ataúd de las promesas muertas. La miró. Su sonrisa se ensanchó para revelar su alegría ante tal encuentro. Era él... Ella alzó una mano para saludarle, sorprendida de su buena educación, cuando el mundo se tambaleabaa su alrededor.

viernes, 15 de octubre de 2010

-Perderte era lo peor que podía pasarme.

-Diez meses.

-No me creía lo que había pasado.

-Diez meses, ni una llamada, un mensaje, una sola palabra....nada.

-Tenía la esperanza de que tú darías el paso.

-....

-Como ves, sigues siendo TU.

-Y al parecer, tu también sigues siendo tu.

jueves, 14 de octubre de 2010

Una y otra vez

¿Tienes alguna especie de poder curativo? Por muy mal que este, apareces tú y sólo es necesaria una mirada para que me olvide de eso que tanto me dolía. A tu alrededor todo acaba por difuminarse, y siempre acabo viéndote sólo a ti, como si no hubiera nada más en el mundo, como si no importase ya nada más. ¿Sabes lo que es sentir que una vez tras otra pierdes la misma batalla? Y aún peor, saber que por más veces que la pierdas no dejarás de intentarlo…

-Te echo de menos.
-¿Y te piensas que yo no? ¿Crees que por un momento me he olvidado de ti?
-Este tiempo has estado con ella, ¿no?
-Sí.
-Entonces ni lo intentes, no puedes entenderlo.

miércoles, 13 de octubre de 2010

mirando al cielo




lejos, extremadamente lejos de tus besos
intentando en vano cazar las estrellas con los dedos,
echandote de menos, tu carita de melocotón, tu boca, tu pelo...
mirando al cielo implorando un tiempo muerto al dueño del universo
para que escuche mis versos y me mande de regreso directo
a la tierra del fuego, a tu cama en llamas, con besos de queroseno
y me enveneno aqui sin ti, extraño tu presencia, carnivoro de tu esencia,
duele mas tu ausencia que las balas del infierno...




Huecco, mirando al cielo


jueves, 7 de octubre de 2010

Si, pero aun así, juntos.2

-He estado pensando razones por las que no deberíamos estar juntos.

-...¿y...?

-No se me ha ocurrido ninguna.

miércoles, 6 de octubre de 2010

¿Acaso importa?


Y seguimos besándonos sin control, como si después de este momento no hubiera nada más. Sin perder el tiempo, sin hablar. Rápido, antes de que nos abandone la locura, antes de que recuperemos la cordura. ¿Acaso importa?

Te regalo mi "ahora". Ya veremos que pasa con el "mañana".

martes, 5 de octubre de 2010

Si, pero aun así, juntos.




-¿Te pasa algo?
-No, nada.
-¿Seguro? Pareces tenso.
-…
-Sabes que puedes decir lo que sea.
-Sólo estoy pensando.
-¿Pensando en qué?
-Mejor pregunta en quién.
-De acuerdo, ¿en quién estás pensando?
-En ti.
-¿En mi?
-Y en mi.
-En nosotros.
-En cómo te conocí. El tiempo que estuve a tu lado sin saber nada de ti. En cómo hemos acabado.
-Quieres decir en la cama.
-No, quiero decir juntos.
-Juntos pero separados.
-Sí, pero aun así, juntos.

lunes, 4 de octubre de 2010

una misma persona, en dos cuerpos diferentes.

Leyendo la entrada de un amigo sobre las amistades, han venido a mi mente recuerdos. He recordado personas que estuvieron en mi vida y ya no están, pero no por ello fueron menos importantes. Personas que sabían cómo sacarme una sonrisa cada día, aunque por circunstacias ahora mismo no mantenga ningún tipo de relación. Otras personas, que de algún modo me fallaron, aunque seguramente aquella amistad no tenia mucho futuro por lo completamente diferentes que somos, y es ahora, con la perspectiva que nos brinda la distancia, cuando vemos que era algo totalmente evidente.

Desde mi punto de vista, todas y cada una de las personas con quienes nos cruzamos y compartimos ciertos momentos de nuestra vida son importantes, porque cada una de ellas deja una parte de ellas mismas en nosotros. De ese modo, lo que yo soy ahora mismo se lo debo a todas y cada una de ellas. Algunas están ahora mismo en mi vida, y son las que saben hacerme reir. Otras ya no están, y son las que con su recuerdo, hacen que sonría. Y otras, que tampoco están, me han hecho más fuerte de lo que yo pensaba.

Como decía mi amigo (persona a la que aprecio incluso más de lo que él piensa), las amistades de verdad hay que conservarlas, y para eso, inevitablemente, tienes que ir dejando atrás otras. Es imposible no equivocarse al escoger a algunas personas, yo misma me equivoqué hace un tiempo escogiéndo y descartando a las personas equivocadas, y en el momento en que necesité realmente apoyo, aquel a quien había descartado me sujetó cuando estuve a punto de caer, y aquella a quien había escogido ni siquiera se dignó a mirarme.

Lo bueno de hacer amistades nuevas, mantener las antiguas, e incluso descartar a algunas es que cada una aporta una cosa diferente. Unas aportan el apoyo actual que necesitamos, otras nos conocen tanto que a veces pienso que somos sólo una persona en dos cuerpos diferentes, otras nos hacen sonreir con recuerdos que jamas olvidaremos y las últimas nos hicieron fuertes con las heridas que abrieron.



Gracias por tus reflexiones Gatsu, ahora tú también eres un poco famoso. Guardame el secreto. =)

sábado, 2 de octubre de 2010

Pensaba que sólo estábamos tu y yo..y ella

Estoy cansada de fingir. De aparentar que todo va bien cuando la realidad es que nada está bien. No quiero seguir mintiendo a la gente que me rodea ni mentirme a mí misma. Lo único que quiero es a ti. No quiero seguir metiendo gente en mi cama con la absurda idea de que cuando se marchen se llevarán tu recuerdo, pensando que será su olor el que quedará impregnado en mis sábanas haciendo que el tuyo pasé desaparezca. Lleno la pared de fotos esperando que sea suficiente para evitar que tu imagen vuelva a mí una y otra vez.
No poder decir tu nombre en voz alta sin temor a romperme de un momento a otro, disimular los escalofríos que me recorren el cuerpo entero cada vez que te veo, controlar el temblor de mis manos cuando me miras, rehuir tu mirada porque se que si te miro todo lo que no digo se verá reflejado en mis ojos y no habrá dónde esconderse…fingir que para mí eres uno más.
Pensaba que era una persona fuerte, pero comprendí que la vida no me había puesto a prueba hasta que apareciste tú.


P-No hagas eso.
H-¿Hacer qué?
P-Eso, mirarme así. No es algo que pase desapercibido precisamente, y te recuerdo que hay otras 21 personas en esta misma habitación, incluida ella.
H-¿De verdad? Pensaba que solo estábamos tú y yo.

P-Sí, tú...ella...y yo.