domingo, 9 de diciembre de 2012

Creciendo.

Es ley de vida, los cambios asustan. Nos da miedo cambiar de colegio, nos da miedo ser diferentes, llamar la atención, no encajar.

Nos da miedo cambiar de amigos, nos da miedo empezar una relación, nos da miedo conocer a alguien y que nos hagan daño.

Las personas entran y salen de tu vida. Los amigos de hoy, no estarán necesariamente mañana. Alguien con quien ayer tenías millones de cosas en común, puede ser un completo desconocido mañana. Del mismo modo, alguien en quien hoy no reparas, puede ser vital para ti mañana.

Crecer implica cambiar, incluyendo a los amigos. No puedes retener a alguien en tu vida, pero sería un error fatal negar la entrada a otras personas.

No tengas miedo de cambiar. Teme quedarte quieta.
No temas sentir demasiado. Teme no sentir nada.

viernes, 7 de diciembre de 2012

Y lloro. Y te lloro.

Lloro.

Y lloro porque no estás, y lloro porque no te tengo. Y lloro porque no sé cómo decirte que te quiero. Y lloro porque me duele saber que no me quieres.

Lloro porque te veo con ella. Lloro porque ella no te quiere, pero te tiene. Lloro porque sé que la llamas. Y lloro porque sé que ella te responde. Lloro cuando no te veo, pero lloro más aún cuando te veo. Lloro cuando sonríes, porque sé que esa sonrisa no es para mí. Lloro cuando me saludas, cuando te tengo al lado. Lloro porque sé que tú no lloras por mí.

Lloro cuando me levanto, porque veo tu ventana. Y también lloro cuando salgo a la calle, porque paso por tu patio. Lloro cuando me dices que estás bien, porque sé que no me echas de menos.

Lloro porque no te tengo, pero sobretodo, lloro porque te quiero.